Elección de colores para nuestra vivienda
Hacer que una habitación parezca mayor.
Pintando toda la estancia en colores claros se logra mayor percepción de espaciosidad. Los colores claros reflejan más la luz y logran sensación de mayor amplitud y luminosidad.
Hacer que una habitación parezca menor.
Si la estancia es tan grande que no parece acogedora, se pintará toda en colores cálidos que darán impresión de que paredes y techos están más cercanos. Igualmente, suelo y techo en tonos más oscuros aunque las paredes intensifican el efecto y añaden definición.
Conseguir que una pared parezca más cercana o más lejana.
Si una vez decorada toda la habitación sigue pareciendo que una pared queda alejada o “desconectada” del resto, lo mejor es pintarla de un color más oscuro. Del mismo modo, si lo que se quiere es ganar amplitud en esa zona de la habitación (por ej., porque hay muchos muebles y parece excesiva la concentración) ha de pintarse en un tono más claro. A la hora de aplicar esta técnica hay que tener cuidado de no desentonar con el resto de la estancia.
PAUTAS GENERALES
1.- El suelo oscuro hace que la habitación parezca de menor tamaño. Además, define los límites de la habitación y dirige la vista hacia abajo.
2.- Los colores fríos retroceden, es decir, un paño pintado en color frío y claro parece estar más lejos de lo que en realidad está.
3.- Los colores oscuros y los cálidos se adelantan, es decir, un paño pintado en estos tonos parece estar más cerca, a menor distancia que lo que realmente se encuentra.